jueves, 29 de julio de 2010


Tras mucho tiempo de ausencia, retomo esta página para intentar recopilar todos (o algunos, muchos se me quedarán en el teclado) los argumentos que he repetido una y otra vez tras la consabida decisión del Parlament de Catalunya de prohibir las corrida

s de toros. Con esto no pretendo imponer mi criterio, es más, busco un debate inteligente y productivo en el que se den argumentos variados, sin entrar en las reiteraciones de “es una tradición”, “es una crueldad”.


El toro de lidia NO es una especie, se puede reproducir de manera efectiva con cualquier vaquita salerosa que se le ponga en su camino. En todo caso será una raza, y ni siquiera ya que no tiene la estabilidad genética requerida para ello, esto significa que un toro de lidia es tan diferente de otro toro de lidia como de cualquier toro. No hay ningún artículo científico que haya podido demostrar lo contrario. (Recuerdo que wikipedia no es una fuente en sí misma, si queréis sumergiros en el “apasionante” mundo de la búsqueda de bibliografía os aconsejo que refresquéis vuestro inglés y vayáis a las bases de datos científicas (Web of knowledge, por ejemplo, si tenéis una biblioteca o universidad cerca, o el mismo google scholar)


Sí, es cierto, también es todo un drama lo que sufren los animales destinados a alimentación en los criaderos, mataderos, etc. No soy vegetariana, ni quiero serlo, pero procuro no consumir ese tipo de alimento, dentro de los límites de mi bolsillo y de mi salud. El que haya actos más crueles no justifica nada, deberían ser evitados todos. Pero sólo a los faltos de argumentos se les ocurre salirse de la discusión en cuestión, por eso diré, que esos animales, al fin y al cabo, se matan para alimentarnos, no para divertirnos.


Un tema que sale mucho es la famosa “extinción del toro de lidia”, como he dicho antes, no es una especie, así que si seguimos consumiendo carne de vacuno no habrá problema con su futuro más inmediato ya que, como he dicho antes, son perfectamente reproducibles con las vacas (¿a nadie se le ha ocurrido nunca, que si el toro de lidia es una especie, por fuerza debería haber vacas de lidia?). Por otro lado, hay normativas que protegen animales que de alguna forma han dejado de ser de “utilidad” para el hombre (el famoso burro catalán, por ejemplo), por lo que no veo por qué no podría ser el caso. Además, y estoy segura que crearé polémica, toros y vacas han sido creados única y exclusivamente por y para el hombre. Lejos quedaron esos uros huidizos, de carne dura y productores de leche sólo en gestación. A la Naturaleza no le hará ningún daño si se extinguen, no confundamos términos, que seamos unos seres sentimentales y melancólicos no significa que vaya a ser un drama medioambiental, todo lo contrario, menos flatulencias vacunas para la atmósfera y recuperación de las grandes extensiones de pasto.


Los mamíferos (donde se incluyen toros y humanos) están en la cumbre de la escala evolutiva. Tienen totalmente desarrollado el sistema nervioso y, por tanto, los cinco sentidos (en muchos casos más que en los humanos). Que no nos digan lo que ven, oyen o sienten no significa que no sean capaces. Que no lloren no significa que no les duela cuando están heridos.


No tendría nada en contra de este festejo (al igual que no tengo nada en contra del boxeo, la lucha libre y otras peleas entre iguales, aunque no me gusten) si fuera de verdad una lucha de igual a igual, sin lanzas, sin banderillas… es decir, torero contra toro. Incluso, me atrevería a decir que, ya que el toro tiene cuernos, podríamos conservar la espadita del torero. Me gustaría ver cómo consigue clavarla sin que el toro esté medio desangrado y agotado de enfrentarse a banderilleros y picadores. En ese caso sí que tendrían bien merecidas las orejas y el rabo. Lo que no sabemos es qué podríamos darle a los toros que ganen la pelea.


Otra cuestión es el tema de los caballos en los ruedos ¿a cuento de qué tienen que enfrentarse dos herbívoros? Caballos y toros no son enemigos por naturaleza, el toro ataca porque asume que es ese raro animal el que le está lanceando (imaginad que miráis a lo alto y veis un don Quijote atacándoos con su lanza, todo en uno, caballo y jinete, visión parecida debieron tener los indígenas americanos), la vista no es precisamente el sentido más desarrollado del astado. Y mención aparte merecería las contusiones que sufre el caballo, por mucho peto que tenga, un toro es mucho más corpulento, y, mientras el caballo, por instinto, intenta repeler sus ataques y huir del cabestro, el lancero le obliga a acercarse y es el toro el que embiste con fuerza. Supongo (no lo afirmo porque no lo sé) que acabarán con hemorragias internas o, mínimo, algún hematoma (¿no los acaban teniendo dos karatekas (eso lo afirmo porque lo he vivido) a pesar de tener petos y a pesar de saber ambos dónde están metidos?).

El argumento más repetido hasta la saciedad y, si me apuras, el único de la mayoría, es el de la tradición. Se les llena la boca con la palabra. Diré que hasta hace poco también era tradición (y sólo voy a nombrar aquellas referentes a animales, por eso de no mezclar cosas que no tienen que ver) tirar cabras desde el campanario del pueblo durante las fiestas (incluso pavas en cierto municipio jienense), hacer bailar osos al ritmo de una pandereta o dar vueltas y vueltas sobre un pony en las ferias. No es tradición pero sí costumbre (¿dónde está la línea divisoria?), y a muchos les parece una salvajada (a otros no…), beneficiarse a las ovejas en las largas y solitarias noches de pastoreo en las montañas (y ni siquiera), meter petardos en el ano a los gatos, atar latas a los perros del rabo, cortar las alas y los picos a las aves (para que no se ataquen dicen, si no estuvieran 20 en una jaulita no se atacarían), atar pollos vivos en lo alto de las cucañas, colgar a los perros de caza (a veces con crueldad dejando que rocen con el suelo). Muchos se han quedado espantados al ver en las condiciones que viven los animales “salvajes” de circo, o los de algunos zoos, incluso se han sorprendido al ver como los balleneros cargaban con un cetáceo (con fines “científicos”). Tampoco nadie se queda indiferente si alguien le da una patada a un perro o desnuca un gato (creo que todos hemos visto las imágenes). Si, para muchos, estas cosas no deberían hacerse, ¿por qué permitir que un animal sea sacrificado únicamente tras herirle, cansarle y ¿por qué no? humillarle?


Curioso argumento el de la pérdida de empleo de miles de personas. Eso debieron pensar los comerciantes de marfil, o los balleneros. También tuvieron que ir al INEM los taxidermistas y los criadores de gallos de peleas.


Considero muy hipócritas a aquellos que se hinchan diciendo eso de que el caso es prohibir y quitar libertades. Queridos, estamos en una sociedad de normas, no creo que os parezca mal que esté prohibido matar a otra persona, sobre todo si vuestro vecino está harto de vuestra música o, simplemente le caéis mal. Y ahí, y muy a pesar mío, he tenido que poner un ejemplo con humanos, porque, de verdad, que me pone enferma ese argumento en cualquier tema. Mucho bohemio de mercadillo hay por el mundo que no le parece luego tan horrible que se prohíba entrar en casas ajenas, robar, violar, etc. Me gustaría que la gente que dice “la cuestión es imponerse y prohibir” se atreva a decir en público que están en contra de la prohibición de la pedofilia o de la imposición del derecho al voto, me gustaría mucho. Si de verdad queréis vivir en “un mundo sin ley” supongo que habrá forma de haceros una burbuja sólo para vosotros…


Por último voy a añadir un par de enlaces tanto a favor como en contra del toreo. La mayoría de las afirmaciones no son demasiado fiables y tienden (sobre todo los antitaurinos) a poner ejemplos un poco demagogos al inmiscuir a los humanos en los argumentos, pero es para que veáis que estoy abierta a un debate pacífico entre ambas partes. Para eso somos el último eslabón evolutivo, ¿no? Me hubiera gustado poner más, pero hay mucho corta-pega en la red y casi todas eran en contra, repitiéndose hasta la náusea:




Repito, estoy abierta a cualquier comentario constructivo. Absteneos anti y pro-taurinos a repetir argumentos ya comentados, a no ser que sea para añadir nueva información (como la de los caballos, me gustaría saber qué pasa con ellos). También pido, por favor, ya sé que va a ser difícil resistirse a la tentación después de alguno de los comentarios que he puesto, que los vegetarianos no entren al trapo, eso es otro debate que ya comentaré, o no.